Hoy V al habla para hablaros de los libros para el verano. Y sí, creo que a todos nos pasa que decimos durante el resto del año “Este libro ya me lo leo en verano” “Este libro para cuando viaje” “Este libro para cuando este de vacaciones” y hoy vamos a hablar sobre esto.
En primer lugar, el impulso de dejar un
libro para más tarde puede venir motivado por muchas cosas. Una de ellas es que
en verano se suele disponer con bastante más tiempo que en invierno. El calor
extremo en la calle a horas diurnas hace que el plan de leer se vuelva a una
muy buena opción.
También el verano es sinónimo de
vacaciones y por lo tanto de viajes. Muchos libros los dejamos para los viajes
por su brevedad o por su buen rollo que nos trasmiten. Esto no quiere decir que
no leamos tochazos en verano, pero de manera general se tiende a llevar el
menor peso posible cuando se viaja.
Destacar también como factor importante
el ambiente. El verano, al menos en España, es sinónimo de piscinas, playa y
calor. Estos entornos favorecen ese momento para nosotros mismos en el que
podemos tumbarnos, cubiertos en una buena sombra a disfrutar de una buena
lectura. El ambiente ayuda mucho a promocionar el hábito de lectura.
Las últimas oportunidades. Existen libros
que no nos apetece leer durante todo el año y los dejamos para el verano. Como
si esos meses fueran hacerlo menos tediosos o se nos volvieran más atractivo.
Por experiencia compartida pensamos que libro que se abandona para el verano
raramente se retoma.
Con respecto a las temáticas, ¿leemos un
libro actual o nos dejamos llevar por los clásicos? Creo que este es el punto
más subjetivo de los expuestos. Creo que cada cual debe decidir leer lo que en
ese momento le apetezca, convenga o quiera. Desde los Revientalibros nos gustan
todos y cada uno de los libros y por tanto no nos podéis hacer decidir entre “papá y mamá”.
Si tratamos el tema por la complejidad
del lenguaje, en verano a nadie le gusta leer libros en los que el tipo de
lenguaje utilizado te implique buscar constantemente significados de las
palabras o tu nivel de concentración deba ser muy amplio. En general los libros
fáciles de leer son muy atractivos para estas fechas.
Desde los Revientalibros pensamos que da
igual que sea verano o invierno y que un buen libro siempre es digno de llevar
a cualquier lado. Leer mucho y si este verano no sabéis que leer, pues fiaros
de vuestro instinto que os llevará a un buen libro.
¡A seguir reventando!
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