- ISBN: 978-84-17044-50-3
- Rústica • 15 x 24 cm •
- 476 gr
- 336 págs.
- Lomo: 22 mm
- IBIC: FA
- PVP: 19,95 €
PREMIO JAÉN DE NOVELA
Una novela que muestra cómo el amor puede salvarnos de la brutalidad del terrorismo
El autor rinde con esta obra un sentido homenaje a las víctimas del terrorismo, situando el eje de la trama en el fatídico 11-M
La dulzura es el título de la novela ganadora del XXXIII Premio Jaén de Novela, que edita Almuzara y que acaba de llegar a las librerías. Una obra de Daniel Múgica que, según recoge el acta del jurado, se ha hecho acreedora al prestigioso galardón literario, uno de los de mayor solera en nuestro país, “por el modo de narrar una historia reveladora de cómo el amor puede salvarnos de la brutalidad del mundo actual”.
Narrada con un estilo incisivo y salpicado de destellos líricos, Múgica ha pretendido con esta novela rendir un sentido homenaje a las víctimas del terrorismo, de cualquier terrorismo, situando el eje de la trama en el fatídico 11-M, fecha en la que arranca una historia dura, emotiva y tierna que saca a la luz lo mejor y lo peor del ser humano.
El punto de partida es la desaparición de la joven Gadea el mismo día en el que, en la estación madrileña de Atocha, los trenes estallan. Es un 11 de marzo. Sus hermanas Estela y Malena la buscan denodadamente, temen que estuviera en uno de aquellos trenes. Y la busca también Judá, escritor frustrado, enamorado de ella hasta el tuétano.
Pero pasan las horas, los días, y no hay noticias de Gadea. Durante esa angustiosa búsqueda, los diversos personajes que la trataron rememoran el tiempo pasado junto a ella, el modo en que influyó en sus vidas, y las circunstancias que propiciaron su internamiento en un lóbrego centro psiquiátrico; una decisión adoptada por Eneko, su padre, un hombre marcado por el fundamentalismo religioso, cuyas obsesiones gravitan sobre el clan familiar.
Una novela que muestra cómo el amor puede salvarnos de la brutalidad del terrorismo
El autor rinde con esta obra un sentido homenaje a las víctimas del terrorismo, situando el eje de la trama en el fatídico 11-M
La dulzura es el título de la novela ganadora del XXXIII Premio Jaén de Novela, que edita Almuzara y que acaba de llegar a las librerías. Una obra de Daniel Múgica que, según recoge el acta del jurado, se ha hecho acreedora al prestigioso galardón literario, uno de los de mayor solera en nuestro país, “por el modo de narrar una historia reveladora de cómo el amor puede salvarnos de la brutalidad del mundo actual”.
Narrada con un estilo incisivo y salpicado de destellos líricos, Múgica ha pretendido con esta novela rendir un sentido homenaje a las víctimas del terrorismo, de cualquier terrorismo, situando el eje de la trama en el fatídico 11-M, fecha en la que arranca una historia dura, emotiva y tierna que saca a la luz lo mejor y lo peor del ser humano.
El punto de partida es la desaparición de la joven Gadea el mismo día en el que, en la estación madrileña de Atocha, los trenes estallan. Es un 11 de marzo. Sus hermanas Estela y Malena la buscan denodadamente, temen que estuviera en uno de aquellos trenes. Y la busca también Judá, escritor frustrado, enamorado de ella hasta el tuétano.
Pero pasan las horas, los días, y no hay noticias de Gadea. Durante esa angustiosa búsqueda, los diversos personajes que la trataron rememoran el tiempo pasado junto a ella, el modo en que influyó en sus vidas, y las circunstancias que propiciaron su internamiento en un lóbrego centro psiquiátrico; una decisión adoptada por Eneko, su padre, un hombre marcado por el fundamentalismo religioso, cuyas obsesiones gravitan sobre el clan familiar.
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